EL CAPITAL RIESGO NORTEAMERICANO SE ANIMA.

    Aunque no existen cifras plausibles que demuestren un cambio en la actividad inversora de las entidades de capital riesgo estadounidenses, el discurso de las mismas ha pasado del fracaso y pesimismo a la esperanza y optimismo.

    Uno de los motivos que destacan los inversores a la hora de enjuiciar el cambio en el ambiente, es la estabilización del mercado accionarial, lo que propicia un marco más favorable de salida a Bolsa para las empresas participadas. Asimismo, también favorecen las buenas noticias procedentes de la industria tecnológica respecto a las mejores perspectivas de ventas para el cuarto trimestre de compañías como Intel Corp. o Advanced Micro Devices Inc.

    Un ejemplo que podría representar este posible cambio tendencial en la industria de capital riesgo estadounidense vendría de la mano de la firma californiana August Capital, que hasta el mes de octubre no había invertido en ninguna nueva empresa, y desde entonces lo ha hecho ya en cuatro sociedades, habiendo comprometido recursos para una quinta inversión.